Cuando uno decora su casa quiere hacerlo creando un espacio agradable y cómodo, mas también quiere un sitio que transmita su personalidad y su estilo.
En terminante, su esencia,
eso que le hace diferente.
Quiere que, cuando un amigo llegue de visita piense “este lugar transmite totalmente la esencia de Fulanito”. Y, como es amigo de Fulanito y tienen valores en común, puesto que se sentirá muy a gusto y también identificado.
Hasta aquí todos conforme, ¿no?
Pues resulta
que una web, es la casa virtual de tu negocioy marcha de la misma manera.
Tu negocio tiene también una serie de cosas que definen su “personalidad”, que es eso que va a empatizar con tus posibles clientes, que tú seguro que deseas que transmita tu casa virtual.
Que, quien llegue, se sienta cómodo y a gusto y desee quedarse.
Y si se queda… ¿no piensas que será más fácil que “os hagáis amigos” y te adquiera algo?
Una marca, son 2 cosas: la parte intangible y la parte tangible. La parte intangible es la esencia de esa marca, lo que no vemos y lo que la define. Lo que la hace diferente.
Tu web tiene que ser coherente con lo que has definido a nivel estratégico en esa base. Y sobre esa parte te hablaré el día de hoy en este artículo, eso que “no se ve”.
La parte tangible, la que si vemos, el diseño, las fotografías, etc, es lo que entra por los ojos..
Haz esta reflexión antes de rediseñar tu web para no pegártela
Sí, ya lo sé.
Cuando emprendemos un negocio, lo queremos ver materializado cuanto antes.
Eso es: verlo.
Todos valoramos más las cosas que se ven, que las que no se ven… como es una web.
Por eso es en la primera cosa que pensamos cuando queremos montar un negocio: “necesito una web”.
Y es cierto, necesitamos una web o nos será mucho más difícil todo.
El error es que, sencillamente por el hecho de tener una, ya tenemos negocio.
Como una web es una cosa que se ve, con lo que podemos interaccionar y nos entra por los ojos, es tangible, pues nos marchamos directamente a encargar una.
Y esto es peligrosísimo.
Si esa web no está
planteada con una serie de objetivosy cumple con una serie de factores previamente definidos… será complicado que el que llegue capte bien de qué trata
lo que debes ofrecerle.
Además, ponte en el lugar del diseñador web: le afirmas “quiero una web para mi negocio de xxxxx”.
Te dirá: “muy bien,
¿y qué debe trasmitir este negocio?”
Tienes que saber responderle con precisión a esta pregunta, para que el resultado de su trabajo sea el conveniente.